En colaboración con D. Ismael Martínez Villa, ideamos un local industrial para el uso hostelero. Se trata de una tipología de fábrica clásica que es tangente a sus límites de parcela. La distribución surge de la imagen de un “huevo frito” en su sartén, cuya yema son los aseos y la oficina, la planta primera la yema y la planta baja la sartén. El conjunto esta rematado por una gran chimenea que ancla el conjunto y lo hace visible. Como curiosidad diseñamos unas puertas correderas por gravedad que siguen funcionando 22 años después.